Partamos de una base. Las verdades absolutas no existen. (y las medias verdades tampoco). Lo que queremos decirles es que lo que le hace bien a una mascota puede que no tenga el mismo efecto en otro.
Son tantas las variables que influyen (raza, genética, entorno) que lo más importante, es entender cómo se comporta la tuya. Muchas veces creemos que hay cosas que les hace bien y resulta que no necesariamente los beneficia Y lo que creemos estar haciendo con la mejor intención del mundo a veces puede ser contraproducente.
Todos pasamos por esto. No te preocupes, nosotros vamos a ayudarte siempre con información que te sirva para que puedas darle a tu mascota el balance necesario para que crezca sana y feliz.
Así que desmitifiquemos uno de los más grandes mitos:
¿Con qué frecuencia y cuánto debe comer mi mascota?
La genética de los perros es bien distinta a la de los seres humanos.
Es por eso que pensar en la lógica desayuno-almuerzo-cena puede ser perjudicial para su bienestar. Generalmente los perros grandes comen una vez y los perros pequeños dos. Porque los perros grandes tienen un metabolismo más lento, que tarda más en digerir y pueden aguantar 24 horas perfectamente.